jueves, 28 de mayo de 2009

María Villamizar: "Cefsprodisc cambió mi modo de pensar"

La ayudante del profesor de costura del Centro de Formación Socialista Profesional para Personas con Discapacidad (Cefsprodisc), María Villamizar, asegura que en los dos años que lleva prestando sus servicios a la institución, ha cambiado su forma de pensar y de ver a las personas con discapacidad.


—¿Cómo se entera de la existencia del centro?
—Recibí un folleto en la calle. En un principio me acerqué a hacer el curso de Repostería durante un año; luego decidí inscribí en el curso retapicería. Al finalizar el curso, el profesor me pidió que me quedara a trabajar con él; yo lo acepté pues me parecía una gran oportunidad de trabajar y aprender cada día más. Me quedé cociendo con el profesor, ayudándolo a hacer los forros, a cortas las telas y otras pequeñas tareas.

—¿Qué tal ha sido el contacto con las personas que poseen algún tipo de discapacidad?
—Ha sido bastante bueno. Fue la primera vez que tengo la posibilidad de compartir con problemas que tienen discapacidades. Me costó mucho adaptarme porque no todos entienden de la misma manera. Tuve que aprender lenguaje de señas, la guía vidente y otras técnicas para poder manejar a mis compañeros.

—¿Le ha costado manejar algún tipo de discapacidad en específico?
—Creo que todas son iguales pues en todas hay muchas cosas que aprender. Por ejemplo aprendes que no puedes darle objetos cortantes, que tienes que repetir varias veces las órdenes, que tienes que explicarte con señas, etc.

—¿Qué enseñan en el curso de tapicería?
—Hacemos los forros para los muebles; se quitan los forros viejos, se tapizan, se hacen cojines. Incluso las personas que quieran acercarse al centro a tapizar sus muebles, pueden hacerlo y nosotros les cobramos algo muy económico.

—¿Qué significa para usted el Cefsprodisc?
—Es una ayuda a nivel personal. Te habitúas a tratar a personas con las que no tenías ningún tipo de contacto. Cambio mi modo de pensar. Las personas con discapacidad son muy humanas, llevaderas, cariñosas, y tienen sus problemas como cualquier otro. Uno aprende de ellos y a ellos les gusta aprender mucho.