viernes, 20 de marzo de 2009

Motivaciones de vida

Los niños con necesidades especiales han logrado metas realmente admirables. Sus diversas anomalías, lejos de ser una carga familiar son fuente de inspiración para seguir trabajando día tras día y dibujar un mejor mañana para ellos.

Cristina Elena, una niña con autismo, fue y es la razón de ser de la organización Autismo en voz alta, una fundación creada por su madre Isabella Paúl, quien se ha dedicado en cuerpo y alma a la educación de su hija.

Hace 17 años, Ángela de Couret crea la fundación Paso-a paso, gracias a la motivación más bella que una mujer pueda tener: su hijo Aberto, un chico que nació con discapacidad intelectual y que hoy tiene 22 años de edad.

La Asociación Venezolana para el síndrome de Down (Avesid) es el fruto del trabajo constante de María Susana Padrón de Grasso, madre de Andreína, una chica de 16 años de edad a la que el síndrome de down no le impidió insertarse laboralmente.

En 2001, nace la Asociación civil Proadopción, gracias a Andrés y Adrián, hijos de corazón de José Gregorio Fernández, el fundador de la organización. Como parte de su iniciativa social, la empresa venezolana Gevenmed, especializada en soluciones para diagnóstico por imágenes, monitoreo y cardiología, decidió crear en 2005 la asociación civil Salud Plena, para la intervención quirúrjica de niños con anomalías anorectales.
Para conocer más acerca de la historia de estas organizaciones y de las lecciones de vida de sus fundadores, haga clic aquí

Fuente: Revista Estampas. El Universal
7 de marzo de 2009